LESIONES

Arma

Se define como un  instrumento de defensa o de ataque. Pueden clasificarse según su diseño (armas de fuego, armas blancas, deportivas, etc.), o según su uso (balísticas, contundentes, cortantes, etc.). En el dictamen, el término “arma”, debe restringirse para cuando es evidente la correlación entre el elemento causal y la lesión. Cuando no hay una clara correlación, es preferible el uso de los términos: “compatible con elemento o instrumento causal”.

La dinámica delictiva va del arma al hecho y aquí opera la clasificación según el diseño; la dinámica criminalística, va del hecho al arma y aquí opera la clasificación según el uso. Un arma clasificada según su diseño como “contundente”, puede ser usada como balística o cortante.

    

Herida

Constituye la trayectoria corporal del elemento causal de la lesión. Esta trayectoria es una característica física que permite correlacionar la herida con el elemento causal y muchas veces, con su dinámica lesional, lo que permite orientar sobre la forma de lesión, dirección del impacto o trayectoria, etc.

Lesión cortante

Se caracteriza por tener los labios de la herida nítidamente separados entre sí. Cuando hay pérdida de sustancia, los bordes de la herida igualmente son nítidos.

Lesión contundente

Se caracteriza por machacamiento o maceración de tejidos, con o sin separación de estos.

Lesión punzante

Se caracteriza porque su profundidad es mayor que su extensión superficial, y esta suele ser relativamente pequeña. La lesión superficial puede tener aspecto cortante o contundente.

Lesión avulsiva

Se caracteriza por desgarro de los tejidos. Puede ser avulsión superficial, cuando compromete la piel y tejido celular subcutáneo. Avulsión profunda cuando compromete músculo y otras estructuras. Avulsión conminutiva, cuando hay amplia separación y fragmentación de los tejidos.

Excoriación

Lesión de tipo avulsivo limitado que se caracteriza por desgarro superficial de la capa córnea de la piel. También se le denomina erosión superficial.

Hemorragia

Extravasación de la sangre hacia el exterior o hacia una cavidad corporal. La hemorragia arterial produce sangre roja brillante y de alta presión; la venosa, sangre oscura y de baja presión o en capa.

Esta diferencia importa en el levantamiento de cadáver, donde debe discriminarse la morfología de la hemorragia, en particular en el análisis de las gotas de sangre sobre los objetos de la escena de los hechos.

Hematemesis

Emisión de sangre por la boca proveniente de hemorragias intestinales. Si es masiva, puede ser de color rojo, pero suele ser de color muy oscuro o negro por efecto de los jugos digestivos.

Melena

Emisión de sangre por el ano, proveniente de hemorragias intestinales. Puede ser roja u oscura, dependiendo de la cantidad y lugar de la hemorragia.

Hematoma

Colección de sangre dentro o entre los tejidos por ruptura de vasos sanguíneos venosos o arteriales. En la fase aguda, el hematoma arterial es pulsátil y puede escucharse soplo sistólico. El hematoma crónico se observa de aspecto claro y cauchoso. El hematoma calcificado es de consistencia dura.

Equimosis

Extravasación de sangre entre los tejidos de la piel, suele ser de origen contundente. Da un aspecto amoratado al lugar de la lesión. Su reabsorción en el vivo se hace en pocos días y cambia de color a amoratado claro, verdoso y amarilloso. En el cadáver guarda relación con el sitio del traumatismo, importante para diferenciarlo de las hipostasis cadavéricas.

Quemosis

Equimosis de las mucosas. Suele presentarse como pequeños hematomas.

Eritema

Enrojecimiento de la piel por congestión vascular, de corta duración. Es un fenómeno normal (no patológico), que obedece a múltiples causas (calor, alergia, rascado, contusión superficial). Puede tener importancia criminalística inmediatamente después de los hechos, porque suele reflejar la forma del elemento contundente, por ejemplo, la palma de una mano o la superficie plana de un machete.

Enantema

Eritema de las mucosas. Su importancia criminalística se revela en los delitos sexuales abusivos, por enrojecimiento, que en ocasiones puede tener aspecto hemorrágico, de las mucosas genitales femeninos.

Edema

Acumulación de líquidos en el espacio intersticial.

Enfisema

Aire en los espacios tisulares; se aprecia crepitación palpatoria de los tejidos. Suele deberse a celulitis anaeróbicas. Ocasionalmente se debe a invasión aérea subcutánea a partir de un tubo de drenaje de neumotórax.

El enfisema pulmonar se produce por dilatación sacular de los espacios alveolares.

Flictena

Acumulación de líquidos de exudado bajo la epidermis, en forma de ampolla blanda. Es muy frecuente en las quemaduras.

Flictema

Acumulación de gases bajo la epidermis, en forma de ampollas, producto de infecciones por anaerobios o por efecto de la descomposición cadavérica. En el primer caso, se observan en el cadáver fresco, en el segundo caso, en etapas más avanzadas de descomposición.

Vómica

Sangrado rojo-espumoso por la boca, proveniente de las vías aéreas o el pulmón.

Emesis

Vómito.